El burnout es una condición cada vez más común entre trabajadores, pero también una de las más difíciles de identificar, sobre todo en entornos de trabajo remoto o híbrido. Muchos empleados no logran reconocer sus propios síntomas o no se sienten cómodos compartiéndolos por miedo al juicio o a mostrar debilidad. A esto se suma la dificultad de los líderes para observar señales físicas o emocionales a distancia.
Señales de agotamiento en personal remoto
Existen indicadores claros que pueden ayudar a detectar el agotamiento antes de que derive en ausentismo o rotación:
- Cambios en el nivel de compromiso: Disminución en la participación activa, entusiasmo y visibilidad en reuniones virtuales.
- Caída en el rendimiento: Incumplimiento de plazos, errores frecuentes o reducción en la calidad del trabajo.
- Fatiga evidente: Lenguaje corporal apagado, distracción constante o comentarios como “estoy agotado”.
- Alteración en los patrones de comunicación: Respuestas breves, falta de interacción, evasión de reuniones o reducción del tono colaborativo.
- Reuniones uno a uno poco frecuentes o superficiales: La falta de conversaciones individuales de calidad impide detectar cambios emocionales y reduce la confianza para expresar malestar.
Acciones que los líderes pueden tomar
Una vez detectadas estas señales, las siguientes acciones pueden ayudar a mitigar el agotamiento antes de que escale:
- Reasignar cargas de trabajo: Identificar tareas que puedan delegarse o eliminarse, priorizando lo esencial para reducir la presión inmediata.
- Promover tiempo de recuperación: Fomentar descansos reales, el uso de días libres y el respeto por horarios personales para facilitar la recuperación emocional.
- Fomentar la comunicación abierta: Crear un entorno seguro donde los empleados puedan expresar cómo se sienten sin temor a repercusiones.
- Ofrecer flexibilidad laboral: Ajustar horarios, facilitar el trabajo remoto o permitir jornadas reducidas para ayudar al empleado a recuperar el equilibrio.
Los líderes no solo deben identificar el agotamiento, sino evitar ser su causa. Las fallas en el liderazgo son un factor estructural en el burnout. Por ello, las organizaciones deben priorizar la selección y formación de líderes con inteligencia emocional, capaces de crear entornos de trabajo saludables y seguros.
Encontrará el artículo o documento completo en el siguiente enlace (podría ser necesaria una suscripción): Tomas Chamorro-Premuzic, “5 Signs a Remote Worker Is Burning Out,” Harvard Business Review, 3 de febrero de 2025. https://hbr.org/2024/03/5-signs-a-remote-worker-is-burning-out